Retrovisor



Cuando te conocí las palomas eran de la paz y no ratas con alas. Cuando te conocí llovía más o no usábamos paraguas mi vecina no roncaba todas las noches no se duchaba a todas horas no expectoraba cada mañana o yo no lo oía Cenábamos más huevos fritos bebíamos más cerveza bailábamos más yo fumaba Cuando te conocí pasábamos ese sueño que se cura durmiendo menos un sueño como nosotros infinito y frágil Cuando te conocí nos saltábamos los semáforos las barreras las olas la primera y la última clase y también la penúltima Cuando te conocí los labios se te hinchaban las palabras se te hinchaban y yo aprendía a elogiar tus ojeras Cuando te conocí teníamos cuatro manos las manos eran nuestras y cualquier cine era perfecto para inaugurar el amor.

Hoy tenemos una casa.